A veces te da por pintar historias al aire,
tus manos-pinceles matizan deshoras, destiempos.
Y pintas y quitas y cortas.
A veces te da por llegar despacio,
cargando en los labios canciones, poesía.
Y cuentas, enciendes, descubres.
Olvidas.
A veces te da por dejarme dormida,
quitarte la sombra callada y calzarte la mía.